Los falsos techos desmontables son una solución elegante para cubrir conductos de ventilación, cableado y otras instalaciones que, en ocasiones, encontramos en locales comerciales, almacenes, oficinas y otras propiedades. Cuando queremos cuidar la estética de nuestro local, elegir un falso techo desmontable nos permite conseguir esa cobertura, sin perder acceso al techo si fuera necesario.
Un falso techo desmontable se construye sobre una estructura de metal anclada al techo, donde se van colocando las piezas o partes del techo. Estas piezas cubren de forma estética el techo real, así como todas las instalaciones que se hallan en él, pero no dificultan el acceso cuando sea necesario. Si hay un problema con la ventilación o la instalación eléctrica y es necesario acceder al techo, remover unas pocas piezas del falso techo desmontable es pan comido. Con este método obtenemos los beneficios estéticos que buscamos, sin sacrificar por ello utilidad y versatilidad.
Factores para elegir un falso techo desmontable
Aunque todas las variedades comparten su facilidad de instalación y su utilidad, existen varios factores que pueden marcar la diferencia a la hora de elegir un falso techo desmontable. Hay una enorme variedad de tamaños y de formatos.
Tener clara la medida del espacio a cubrir puede ser un factor determinante. La mayoría de las placas y bandejas tienen un tamaño de 60×60 centímetros, o de 120x60cm. Las placas pueden cortarse, y suele ser necesario para los bordes y las esquinas de los techos. Otros formatos, como las lamas o las rejillas metálicas, se pueden fabricar en diferentes longitudes según las necesidades del proyecto.
¿Qué materiales hay?
Elegir un falso techo desmontable muchas veces se convierte en una cuestión puramente estética, y otras veces puede ser una cuestión de utilidad. Mientras que materiales como la madera ofrecen principalmente su buen aspecto, hay otros materiales como la lana mineral que puede añadir beneficios como el aislamiento térmico y el aislamiento acústico.
Algunos de los materiales que te puedes encontrar al elegir un falso techo desmontable, son:
- Placa de yeso laminado o pladur: Es muy fácil de montar y su acabado es muy destacado. A menudo se añade un revestimiento vinílico, con función bactericida y fungicida así como clasificación ISO 4 para salas blancas; muy útil para espacios en los que se trabaja con comida.
- Lana mineral: Ofrece un buen aislamiento térmico, así como acústico. No solo mantiene el interior fresco en verano y caliente en invierno, si no que sirve de protección pasiva contra los incendios.
- Fibras (de madera y de vidrio): A parte de su gran capacidad de protección contra el fuego, las placas de fibra ofrecen una destacable atenuación acústica lateral, ideal para locales comerciales. Además, son bastante duraderas por lo que no necesitan mucho mantenimiento.
- Escayola: Destaca por su gran variedad de acabados decorativos desde lo moderno hasta lo elegante. También es la opción más económica, al ser un material barato y con pocos beneficios adicionales. Si la construcción del edificio ya ofrece un buen aislamiento, o el acabado estético es muy importante para el local, esta sería la mejor opción.
- Metal: Existen muchísimas opciones para elegir un falso techo desmontable de metal, tanto por materiales como por diseño. Las más solicitadas son las placas de aluminio o las de acero, que soporta mejor los espacios húmedos. También destacan por ser muy duraderos y no necesitar demasiado mantenimiento.
- Madera: Un falso techo desmontable de madera tiene un buen acabado decorativo. La madera es uno de los materiales con más opciones estéticas, lo que la hace muy adecuada para locales comerciales u oficinas donde se vaya a atender a clientes.
Acabado e instalación
Hay dos factores que remiten principalmente a la instalación: los cantos (rectos, escalonados u ocultos) y la perfilería (gancho, click, perfil angular y perfilería oculta). En algunos materiales (metal, madera, escayola y yeso) es posible hacer perforaciones para mejor acondicionamiento acústico, y dependiendo de la estética que busquemos podemos elegir entre perforaciones redondas, cuadradas o lineales.
A la hora de elegir un falso techo desmontable, debes saber que todos los tipos son fáciles de instalar, así como de reparar o remover. Hay una enorme variedad en diseños y funciones, y la elección depende sobre todo del tipo de interior que estemos acondicionando (comercial, almacén, oficina…). A veces el asesoramiento profesional, puede ayudarte a tomar la decisión más correcta e informada. Si quieres saber más, ¿a qué esperas para ponerte en contacto con nosotros?