Conoce los diferentes tipos de aislamientos para fachadas
Los aislamientos para fachadas son uno de los elementos más importantes de un edificio o vivienda. Además de permitir que las temperaturas dentro de la construcción sean frescas y estables durante el verano, también sirve para mantener el frío a raya durante los meses más fríos. Además, proporcionan gran eficiencia energética gracias a que pueden retener el calor; reduciendo las facturas de la calefacción a final de mes.
Tampoco podemos olvidar mencionar que los aislamientos para fachadas proporcionan aislamiento acústico; lo cual es muy beneficioso en zonas donde hay mucho ruido. Sin embargo, con la gran variedad de aislamientos que existen, encontrar el ideal para cada edificio o vivienda es algo complicado. Requiere de estudios cuidadosos y también puede depender del presupuesto disponible. Te hablamos sobre los principales a considerar.
Aislamientos para fachadas de lana mineral
La lana mineral se suele hacer de roca o vidrio, pero independientemente del producto final exacto, todas tienen una característica similar: la baja conductividad térmica. Además, no son inflamables. Gracias a esto, los aislamientos para fachadas de lana mineral suelen tener una gran variedad de uso en diferentes tipos de edificios.
Otra de sus características es que la lana mineral también funciona para el aislamiento de la humedad. Se debe a que no es un material hidrófugo; es decir, no tiene afinidad por el agua. Por otro lado, es necesario considerar que no evita filtraciones y no impermeabiliza. Sin embargo, es reciclable y es respetuoso con el medio ambiente.
Se usa principalmente como revestimiento en edificios residenciales, comerciales e industriales. Sin embargo, también se puede aplicar en sistemas de climatización y ventilación, para aplicaciones en marina e instalaciones térmicas-industriales. Sin duda, es uno de los materiales más versátiles y que seguramente podrás aplicar en cualquiera de los objetivos o necesidades que tengas.
Aislamientos para fachadas de poliestireno extruido
El poliestireno extruido es también uno de los aislamientos para fachadas más usados. También se le conoce como XPS y consiste en una espuma rígida de carácter termoplástico. Es un material bastante ligero sin dejar de ser resistente y fuerte. Al igual que el anterior, es altamente resistente al fuego, es reciclable y no absorbe el agua. Funciona principalmente como aislamientos para fachadas térmicos y acústicos.
Debido a que tiene un bajo grado de conductividad, no es necesario emplear grandes cantidades del mismo para alcanzar un determinado grado de aislamiento. Por lo tanto, no será necesario emplear grandes cantidades de este material para conseguir buenos resultados de cobertura. Se puede aplicar en cubiertas planas, inclinadas, fachadas con aislantes de la cámara de aire, suelos y puentes térmicos.
Este material a menudo se suele confundir con el poliestireno expandido. Sin embargo, ambos elementos se fabrican de manera diferente, aunque los dos son muy eficientes cuando se trata de aislamientos para fachadas. Sin embargo, el XPS es resistente al agua, mientras que el poliestireno expandido no lo es.
Paneles de virutas de madera
Al igual que los anteriores, estos aislamientos para fachadas son totalmente sostenibles y amigables con el medio ambiente. Además, son fáciles y rápidos de instalar, además de contar con seguridad contra incendios, resistencia térmica y también funciona como aislamiento acústico.
Los paneles de virutas de madera tienen un uso principalmente estético. Sin embargo, cuando se combinan con elementos de aislamientos para fachadas, tales como la lana y EPS, pueden conseguir las características necesarias para funcionar como perfectos revestimientos.
Sistema de cubierta verde
Por último, tenemos el sistema de cubierta verde. Mientras que no se puede decir que forma parte de los aislamientos para fachadas que muchos usan, es un revestimiento que se puede usar para diversos objetivos estéticos y útiles. Estos se pueden colocar en los techos de un edificio para permitir crecer la vegetación. Sin embargo, una de sus mejores características es la impermeabilización que ofrece, además de funcionar como un repelente de raíces.