¿Qué es una passive house?
¿Es la primera vez que lees algo sobre una passive house? Pues es un término que a partir de este momento seguro que se te hace más familiar, porque se le está dando muchísimo protagonismo. Una casa pasiva es un concepto que hace referencia a construcciones eficientes. Ahora que le estamos dando una gran importancia a poder ahorrar sin sacrificar el bienestar que podemos tener en casa, esto te va a interesar.
Una passive house necesita, en un primer momento, un estudio en profundidad del clima de la zona en la que se va a construir una vivienda y en los materiales que se van a usar. Con todo, la ubicación de la casa también importa. Si la terraza tiene orientación norte, será un poco difícil aprovechar el sol que puede calentar la vivienda sin necesidad de nada más. Así que, ¿qué más puede ofrecer una casa pasiva?
Reduce la factura de la luz notablemente
La principal ventaja que tiene una passive house es que se va a notar un ahorro en las facturas. En verano, apenas hará falta usar el aire acondicionado y qué decir en invierno ¿le podrás decir “adiós” a la calefacción? Es posible que sí y es que una casa pasiva va a contar con un aislamiento térmico que va a propiciar a que dentro de la vivienda siempre haga una temperatura estupenda, lo que es de agradecer.
Además, el hecho de apostar por este tipo de aislamiento favorece el consumo de energía de una manera responsable. Ya no hay que depender tanto de productos realmente caros, como puede ser la instalación de un aparato de aire acondicionado, y esto repercutirá positivamente en el medioambiente. Cuantos menos recursos consumamos, mejor. Así que, ¿te sumas a tener una passive house?
Menos consumo, más ahorro
Ahorrar es fundamental, así como lo es consumir lo menos posible. Con una passive house esto se puede hacer por una sencilla razón: una casa pasiva se autoabastece por sí misma. Es capaz de retener dentro del hogar ese calor que ofrece el sol por la tarde para que se mantenga durante esas horas después del atardecer. El aislamiento es la herramienta más eficaz, pero también la orientación de la propia passive house.
Esto también se traduce en un menor impacto ambiental, ya que desde el comienzo de la construcción de una passive house y durante los años en los que se habite en ella el medioambiente se tiene siempre en cuenta. Cero desperdicios, aprovechamiento eficiente de la energía, dejar de depender de la calefacción y del aire acondicionado… ¿Qué más podrías pedir? Así es una casa pasiva.
Su duración es mucho mayor
¿Qué sucede con las viviendas que no son passive house? Pues que, con el paso de los años, las humedades pueden terminar haciendo estragos, por ejemplo. Esto con una casa pasiva no ocurre, ya que se han elegido materiales de muy alto nivel y respetuosos con el medioambiente, por lo que siempre se mantendrá en perfecto estado durante años. Además, ¿sabes que las reparaciones se reducirán?
Esto también implica menos dinero que gastar y la gran ventaja de poder disfrutar de una casa que, realmente, sea cómodo vivir en ella. Tendrás menos preocupaciones, más comodidades, mejor ahorro. ¿Qué podrías pedir más? Estamos seguros de que nada. Por eso, las passive house son ya un presente que están teniendo una demanda que va en aumento. Tú también te puedes beneficiar de una casa pasiva.
Una casa pasiva solo tiene ventajas, se vende mejor, su precio se encarece con el tiempo en lugar de disminuir, supone una inversión estupenda… La verdad es que incluso a veces hay ayudas para apostar por este tipo de hogares que es normal que tengan tanto protagonismo. ¿Sabías todo esto sobre una casa pasiva?